En la última tanda para llevarme las últimas cosas de Bulnes lloré como una marrana mientras subíamos y bajabamos con las cajas y las macetas y las plantitas medio muertas. Ahora en la casa nueva veo las cajas que aún no vacié y me da la sensación que cuando las vacíe ya me queda definitivamente nada. Porque es que veo mi casa en las cajas, ¿hice como esa síntesis en tan poco tiempo?, ¿una casa puede ser una caja?. Pero el corazón es el mismo y se desinfla con tanta pérdida. Perdón pero es que seguir escribiendo sobre esto es lo único que se me ocurre para calmar un poco esta pena.
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