Y ahora...
Como me cansé, porque me quedé bloqueada con la historia de la novela, me puse a escribir poesía y volvió la fluidez, que no tenía hace rato, que alegría, debo desterrar el fantasma que me hace pensar a veces que no voy a poder escribir ni una sola línea más, mentiras! esto fluctúa pero no desaparece, no se va, está dentro y sigue funcionando aún cuando no piso las teclas con mis dedos, o escribo en mis cuadernitos, sigue adentro en el inconciente y de pronto plop! sale. Qué alegría!
Labels: alegría